5 trucos de pintura inteligentes y ahorradores de tiempo

¡Y cada paso tiene solo dos palabras!

Foto: Getty Images

Es una situación común con la que cualquier persona que haya pintado alguna vez una habitación probablemente esté familiarizada: acabas de cepillarte una capa de pintura y necesitas esperar una hora para la siguiente, o quieres tomar un descanso para la cena y terminar de pintar más tarde. ¿Qué hacer con tu pincel y rodillo?

En lugar de pasar el tiempo para lavar bien el rodillo entre cada capa, colocar la cubierta del rodillo en una bolsa de plástico resellable puede ahorrar el día (y 10 minutos de tu tiempo). Este truco de pintura y los demás a continuación pueden ayudarte a ahorrar tiempo, energía y pintura cuando abordes tu próximo proyecto de casa. Aquí hay cinco trucos de pintura inteligentes que te gustaría que lo supieras antes.

01 de 05

Sumérgete en ella

Wendell T. Webber

No sumerjas un cepillo más de un tercio del camino en la pintura. El exceso de pintura no acelerará el proceso, pero obstruirá la base de las cerdas, dificultando la limpieza y acortando la vida útil del cepillo.

02 de 05

Límpialo

Wendell T. Webber

Limpia el borde de la lata de pintura con un destornillador envuelto en un trapo. Si tienes pintura en la ranura, no podrás sellar la parte superior firmemente.

03 de 05

Etiquétalo

Wendell T. Webber

Cubre la lata abierta con una envoltura de plástico para crear un sello limpio, luego golpea la tapa con un martillo. Pon un poco de pintura en la tapa con un trapo para que te recuerde el color. Escribe el nombre y el número de la pintura en la tapa con un marcador permanente para que puedas volver a ordenar si es necesario.

04 de 05

Almacenarlo

Wendell T. Webber

Mantén las latas boca abajo para crear un cierre hermético alrededor de la tapa. Asegúrate de guardar las pinturas de látex donde no se congelarán, ya que son a base de agua.

05 de 05

Bolsa

Wendell T. Webber

¿No hay tiempo para limpiar? Coloca la cubierta de tu rodillo en una bolsa con cierre de cremallera que se puede volver a sellar y guárdala en el refrigerador o en un lugar fresco durante las pausas para pintar (o durante la noche). Asegúrate de que no haya exceso de aire en la bolsa.

Entradas relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *